Meditación
Psicólogo Madrid. Psicólogo Valladolid. Terapeuta gestalt Madrid. Terapeuta gestalt Valladolid.
La meditación nos ayuda a calmar la mente y a poner conciencia en nuestras vidas. Es una practica saludable que conviene que incluyamos en nuestro día a día.
Sin embargo puede que pongamos como pega la dificultad de hacerlo en una vida que vamos llenando con diferentes tareas. Pese a que os recomiendo buscar ese tiempo y espacio para poder dedicaros a la su practica, iré proponiendoos otros modos de meditación que permiten integrarla con nuestras actividades diarias y beneficiarnos de su practica regular.
Meditación 1: La escucha
Escuchar auténticamente requiere una gran participación personal.
Podemos diferenciar una escucha externa (lo que ocurre fuera) y una interna (nuestras sensaciones, emociones, pensamientos).
Escuchar realmente requiere no elegir lo que escuchamos, no filtrar (algo que habitualmente hacemos sin darnos cuenta y que realizamos en función de nuestras preferencias, prejuicios, defensas,…).
Exige ser un testigo, una actitud de observador.
Practicar la escucha puede ser de gran utilidad en nuestras vidas. Nos permite percibir la realidad de un modo más claro, sin tanta ilusión entendida como filtro por el que dejamos pasar solo lo que coincide con los patrones que nosotros hemos creado.
Es abrir las persianas para que entre la luz, el lugar de creer que es sólo luz lo que entra a través de sus rendijas.
De este modo también la escucha puede ser un gran método de meditación que nos aportará múltiples beneficios.
Nos centraremos de momento en esa escucha externa para utilizarla como meditación.
Así que párate y escucha a tu alrededor. ¿Cómo es el ruido del tráfico? Como escuchas los pasos de la gente, la escoba del barrendero, el ruido del corta césped, el de las teclas del ordenador, el ruido que viene de los vecinos, la música del coche,…
¿Qué otros sonidos percibes?
No entres en el juicio: esto me gusta, esto no,… A lo mejor es inevitable, pero déjalo pasar, no te aferres a ello. La tarea es la escucha y al pasarlo por el juicio te pierdes de ella.
Escúchalo todo mientras respiras, recordando no enjuiciar, y presta atención a como cambia tu experiencia interna. ¿Estas más tenso, más relajado?
Normalmente el resultado acaba siendo estar más calmado, poder estar aquí y ahora, con mayor presencia y consciencia, pero si el resultado es la tensión mira a ver que es lo que ha sucedido, cuando te has puesto tenso, estás peleando con algo, tratando de cambiarlo,…
El objetivo no es la calma o la tensión, sino poder poner conciencia y avanzar en nuestro autoconocimiento,… la calma vendrá por añadidura como en un vaso con agua y barro este acaba quedando al fondo cuando lo dejamos estar suficiente tiempo.
